Mucho ojo: Circonia y moissanita son dos piedras que de manera fraudulenta pueden llegar a ser vendidas como diamantes auténticos, sin serlo
En nuestro país, la gemología con especialización en certificación de diamantes, no es profesión frecuente, entre quienes la ejercen de manera prestigiada se encuentra Miguel Ángel Ramos Huerta, un especialista en el tema acreditado y respaldado académicamente por el Gemological Institute of America, GIA, campus NY; razón por la que él, desde 2013, pertenece a la Alumni Association.
Además, Miguel Ángel pertenece al distinguido equipo de gemólogos que se encuentran acreditados en un sitio especialista en certificación de diamantes. Como un experto en el tema, Miguel Ángel incluye como servicio la información preventiva, a fin de evitar posibles fraudes en la compra de diamantes, debido a la abundante presencia de imitaciones dentro del mercado joyero. También, sus actividades comprenden la facultad de extender un certificado de autenticidad, único documento que valida la autenticidad de un diamante.
Servicios gemológicos imprescindibles cuando se está en búsqueda de un diamante perfecto, destinado a lucir en una joya única, ya que es posible encontrar vendedores deshonestos que con frecuencia, ofrecen piezas de imitación sin valor alguno y a un costo muy elevado. De allí que sea importante saber que una de las piedras más empleadas para servir como imitación de un diamante, es la circonia cúbica o CC, una piedra con un valor muy bajo y una durabilidad por demás limitada. Lo anterior, debido a que las circonias son piedras muy utilizadas en joyería y se llegan a confundir fácilmente con diamantes, ya que ambas piedras son muy parecidas en cuanto su forma.
Sin embargo, la circonia posee características que las hacen distintivas de un diamante auténtico. Entre esas características, podemos mencionar que el diamante es un magnífico conductor del calor, a diferencia de las demás piedras que son un tanto aislantes y no resultan buenos conductores; esta propiedad particular del diamante puede ser científicamente comprobada y medida, mediante probadores especiales de diamantes.
Una técnica indispensable que se utiliza para comprobar la autenticidad de un diamante, requiere un poco más de práctica para distinguir con precisión la diferencia entre piedras auténticas y aquellas que no lo son; para la aplicación de esa técnica se utiliza lupa de 10 x aumentos con la cual, al observar una circonia, ésta va a mostrar una naturaleza de dureza suave durante el proceso de pulido.
De tal forma, en la circonia las esquinas facetadas se encuentran más redondeadas, mientras que en los diamantes las facetas se observan con ángulos agudos y muy bien definidos.
Otra de las piedras que en la actualidad se emplean como sustitución de los diamantes, es la moissanita. Como característica principal, podemos señalar que la moissanita posee un índice de refracción más alto que el diamante, razón por lo que es una piedra extremadamente dura, además de cristalina y con resistencia considerable al calor sin alterar su composición química y color; de hecho, la moissanita es piedra única de buena claridad, dispersión y brillo increíble.
A continuación, presentamos las características de la moissanita, mismas que llegan a interpretarse de manera errónea como las de un diamante auténtico.
El brillo. Contra lo que pudiera pensarse, la moissanita es más brillante que los diamantes. Dicho brillo se produce por el índice refractario de la piedra, que mide cantidad de luz que entra dentro de la gema. La moissanita presenta un índice refractario importante de 2,65 a 2,69 y el cual es superior al del diamante.
El lustre. Esta propiedad se mide por la cantidad de luz que se refleja fuera de la superficie de la piedra, la moissanita posee índice refractario superior al del diamante, por lo mismo refleja mucha más luz, tanto en superficie como en interior de la piedra.
La dispersión del fuego. Mide como la luz entra intensamente en la piedra y se dispersa, formando así un espectro de colores visuales. En la moissanita, esta característica resulta más de dos veces superior a la del diamante.
La dureza. De acuerdo a la escala de Mohs, la dureza de una piedra es determinada por su resistencia, en el caso de la moissanita, su grado de dureza es de 9,5 mientras que el diamante se ubica en 10.
Miguel Ángel Ramos Huerta G.D.
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