Una fuerza maternal cargada de energía, protección y generadora de vida
Por sus propiedades naturales, capaces de fortalecer el aura y con un profundo significado de fortaleza, amor y equilibrio, las piedras de mayo tienen una conexión simbólica y profunda con la fuerza maternal. La esmeralda, la amatista, el cuarzo rosa, las perlas y la turquesa son las piedras representativas del quinto mes del año.
Por su color verde vibrante, la esmeralda evoca el amor incondicional, simboliza la fertilidad y la esperanza con una profunda conexión emocional. Sus cualidades se atribuyen a la primavera y la renovación, convirtiéndola en el regalo perfecto para honrar a mamá con una joya cargada de significado y elegancia atemporal.
La amatista está asociada con propiedades curativas, protectoras y purificadoras, lo que la convierte en una piedra natural muy buscada. Su color morado la hace destacar entre otras y es ideal para quien buscan serenidad y equilibrio emocional. En la joyería es muy común verla en pulseras y gargantillas.
En tanto el cuarzo rosa simboliza el amor incondicional y la compasión. Se ha convertido en una piedra popular en joyas que buscan transmitir afecto y cariño hacia mamá, por ello es considerada una de las piedras de nacimiento del mes de mayo.
Sin duda, las perlas son un clásico atemporal que nunca pasa de moda y que siempre están presentes en la joyería, ¿sus cualidades?, son piedras que representan la pureza y la elegancia, siendo una elección segura para regalar en este 10 de mayo.
Definitivamente una piedra protectora es la turquesa, la cual destaca por su color vibrante y sus propiedades asociadas al descanso, la calma y la vitalidad, incluso está asociada a impulsar la creatividad y el desarrollo personal. La turquesa es una piedra predominante en la joyería, y podemos verla en dijes, anillos, generalmente en joyas elaboradas en plata.
