Dentro de los encantadores lugares de la Zona Metropolitana de Guadalajara, San Pedro Tlaquepaque destaca sin titubeos. Es un destino colorido, casi mágico y con múltiples sorpresas por descubrir.
Para comprobarlo, vale la pena visitar su centro. Puntos como la calle Juárez o el andador Independencia, se catapultan como tesoros imperdibles para los amantes de los deleites, por ejemplo, diferentes restaurantes complacen a los paladares más exigentes, tiendas especializadas en dulces mexicanos, nieve de garrafa o Tequila también son parte del panorama, mientras diversas galerías conquistan a los de corazón artístico gracias al trabajo de creativos que han puesto en alto el nombre de México.
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