Victoria de plata

por adminjoyam

El Gran Premio F1 es considerado como uno de los mejores eventos deportivos en el mundo gracias a su gran historia, espectáculo e importante derrama económica que deja en donde se lleva a cabo.

El pasado 7 de noviembre, en la Ciudad de México, el Autódromo Hermanos Rodríguez fue sede del Gran Premio de México de F1, un evento que reunió a más de 100 mil espectadores de distintas partes del país y del mundo, dejando una derrama económica de más de 80 mil millones de pesos.

La gran participación del piloto jalisciense, Checo Pérez, quien logró subirse al podio en la tercera posición llenó de entusiasmo a una audiencia que no sólo vio el brillo del talento deportivo, sino del gran trabajo de artesanos orfebres que estuvieron a cargo del diseño y elaboración de cada uno de los trofeos entregados a los pilotos ganadores.

Elaborados por la firma de joyería mexicana TANE, los trofeos fueron fabricados en plata .925, con piezas simétricas que simbolizan la libertad y el movimiento a través de líneas que simulaban las alas de un águila real, evocando el poderío y la velocidad del ave protagonista de nuestro lábaro patrio.

“Este trofeo es el reflejo del gran talento y creatividad de los artesanos mexicanos y estoy seguro que es el digno premio para los tres primeros lugares de la carrera mexicana», dijo Federico González, director general del Gran Premio de México.

Cada trofeo estaba montado en una estructura hecha a base de cuarzo verde, con una placa también de plata que mostraba los los logotipos de la Fórmula 1 y del Gran Premio de México y el lugar en el que quedó el piloto (tercero, segundo o primero; y en la parte trasera estaban tres cuadrados tricolores a manera de bandera y el año 2021.

«Estos hermosos y únicos trofeos representan lo mejor de la artesanía mexicana, están hechos a mano con la mejor plata mexicana por los más talentosos artesanos de TANE, y serán entregados a los ganadores de la edición mexicana del evento de automovilismo más importante del mundo», expresó Ralph Simons, CEO de TANE.

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