Por: Thelma Gust Ramos
Ubicado a un costado del Teatro Degollado, a unos pasos de la Catedral, muy cerca del Instituto Cabañas y a unos metros de la Zona Joyera, el Hotel De Mendoza es una joya histórica en el corazón de la ciudad.
Con una arquitectura colonial del siglo XVI, el recinto conserva la arquería original de lo que fue el Convento de Santa María de Gracia, que ocupaban las monjas Dominicas, y que también servía como colegio de niñas.
“El Hotel De Mendoza conserva su arquitectura colonial, el mobiliario de las habitaciones fue pintado a mano por Alejandro Rangel Hidalgo originario de Colima, famoso a nivel mundial quien estableció su propio estilo ‘Rangeliano”, comparte el recinto.
Mantiene intactas pinturas de estilo barroco del artista mexicano Agustín Parra, que de acuerdo con el recinto, por sus obras elaboradas para el Papa Juan Pablo II fue nombrado proveedor oficial del Vaticano, además de tener un mural pintado por el artista michoacano José María Servín, quien ha sido premiado a nivel internacional. Desde 1968, Hotel De Mendoza opera como un recinto hotelero con experiencias completas tanto para el turismo de negocios como el familiar. De acuerdo con Raúl de la Brena Salazar, gerente del hotel, esta alternativa de hospedaje en el Centro Histórico de la Ciudad conserva el estilo colonial y clásico con todas las amenidades de los hoteles modernos.
“Para los huéspedes tenemos restaurante, alberca, gimnasio, tenemos una terraza espectacular con vista a toda la ciudad; salones para eventos, algunos con vista hacia la Catedral.”
Su valor agregado, la hospitalidad y calidad en el servicio personalizado que brinda a sus huéspedes, quienes más que una estadía experimentan una experiencia en la que el cariño y amor por visitar Guadalajara se enriquece.
“El trato al cliente y al huésped siempre es personalizado. Tratamos de saber el nombre de todos los huéspedes para saludarlos por su nombre, estamos al pendiente de qué es lo que les gusta para que cuando ellos cuando hagan su reservación podamos recomendarles alguna habitación que pueda ser más agradable para ellos. Tratamos de tener una comunicación cercana para saber lo que prefieren”.
Ante una reactivación del turismo que retoma su dinamismo poco a poco, Hotel De Mendoza apuesta a mantener muy marcada la diferencia que ofrecen en comparación con otros hoteles en la ciudad, privilegiando en todo momento la capacitación a su personal para brindar el mejor servicio.
Con una fuerte apuesta por atraer al turismo nacional desde la pandemia, este recinto hotelero recibe en un 75% a huéspedes que vienen de la Zona del Bajío, Ciudad de México, Monterrey, Toluca, entre otros.
“A nivel nacional hemos recibido huéspedes de todo el mundo, como Cuba, Australia, Japón, Estados Unidos, Canadá, y ahorita se está viendo mucho el turismo Sudamericano”.
Para el gerente del hotel, Guadalajara es un destino obligado para quien desea conocer México, pues el tequila, la charrería y el mariachi es lo que reconoce a México en otras partes del mundo. La belleza arquitectónica, gastronómica y en sí toda la cultura que distingue a la Perla de Occidente ha permitido que, aún y con los retos de la pandemia, Hotel De Mendoza siga consolidando su liderazgo en la ciudad.
