La oportunidad de introspección empresarial durante la pandemia permitió a muchas firmas fortalecer su cultura organizacional para hacer frente a la volatilidad
Como a todas las industrias a nivel global, la crisis sanitaria afectó la cadena de valor de las empresas del sector moda en México, poniendo al descubierto la inminente necesidad de encontrar nuevas fórmulas para salir adelante.
Jacobo Sin A es una marca de moda jalisciense que, tras sobrellevar los efectos de la pandemia más grave del último siglo, su capacidad de reinvención es el reflejo de la importancia de estar preparados para el cambio.
“Es una marca que sobrevivió a la pandemia, pero fue difícil lidiar con esta situación porque tuve que despedir a todos los que trabajamos para la firma. Para mí fue tormentoso ver cómo un trabajo de seis años se terminaba de un día para otro», compartió el diseñador Carlos Jacobo, creador de Jacobo Sin A.
Sin fórmulas exactas para lograrlo y asumiendo riesgos, comenzó a replantearse si lo que venía desarrollando en los últimos años podía sostener los efectos de una pandemia que aún sigue dejando estragos. La adaptabilidad, flexibilidad, curiosidad y capacidad de manejar ambientes complejos le permitió reestructurar nuevamente lo ya construido.
“Me sirvió muchísimo aclarar mis ideas, retomar mis ideales y analizar si el rumbo que estaba tomando era el que yo quería; entonces, en pandemia, comencé a analizar y me di cuenta de muchas cosas que me gustaría cambiar. Empecé a cambiar a lo que en un inicio quería para la firma y que tal vez se había nublado un poco y empecé a reestructurar nuevamente”. Actualmente, la firma cuenta con el doble de colaboradores que estaban en tiempos pre-pandemia. Identificar el talento y enfoque claro de las personas, le dio una mayor estabilidad tanto en un margen económico como creativo.
“Una de las cosas iniciales fue siempre inspirarme de México, por lo que empecé a tomar nuevas inspiraciones saliendo de mi zona de confort en cuanto a diseño, colaborando con más personas, pues antes todo se hacía in-house desde mi taller y ahora ya estoy trabajando con maquilas externas a Jacobo Sin A, lo que ha permitido a tener más capacidad de producción y dar empleo”.
Al percibir qué cosas se podrían hacer mejor o diferentes, Jacobo sumó a nuevos colaboradores que le permitieran obtener mejores resultados en áreas contables, administrativas y de operación, pasando a una visión empresarial más colaborativa, robusta y efectiva.
Un diagnóstico sobre el potencial de su firma, le permitió identificar al diseñador los tiempos, espacios y lugares en lo que debía estar presente, despertando de nuevo ese carácter de originalidad y exclusividad con el que había sido concebida la marca.
“Antes, trabajaba con la intención de que siempre Jacobo Sin A sonara, tuviera siempre publicidad, que más personas la vieran, pero cuando regresamos de la pandemia me di cuenta que muchas de las veces no estaba tan convencido con los proyectos a los que decía sí, por lo que cuando regresé empecé a decir no a muchos proyectos y eso me está ayudando a retomar nuevamente la identidad y exclusividad de la firma”.
Carlos Jacobo, virgo apasionado por crear moda, arte y creativo de buen gusto, destacó el gran valor que actualmente tiene el diseño mexicano a nivel nacional e internacional, sobre todo, en el valor que los clientes le dan a las piezas de autor al adquirirlas.
“Pienso que todos los diseñadores nos hemos encargado, número uno, en saber quién es nuestro cliente sin distraernos en alguien que no puede ser de nuestra marca; y número dos, el que hemos sabido como diseñadores darle el valor y respeto a nuestro trabajo”.
Para el diseñador, la tendencia de consumo ha cambiado. Si bien, el sentido de pertenencia y exclusividad se han convertido en dos aspectos importantes para quien adquiere piezas de autor, la apertura a looks que combinan piezas de cadenas de Inditex, comerciales con las de diseñadores son cada vez más comunes y mejor vistas.
“Creo que ese es el secreto: que podamos identificar las piezas exclusivas, o nuestras inversiones, con alguna pieza que solamente es complementaria. En la actualidad, las personas buscan exclusividad, por eso todas las personas que hacemos arte, moda, tratamos de imprimir ese sello más exclusivo para que se note que la pieza viene de un diseñador tanto en el segmento joyero, calzado y ropa”.
Con presencia en puntos de venta donde sólo se venden productos de moda hechos en México, Jacobo Sin A actualmente tiene presencia en Guadalajara, Ciudad de México, Tulum, Puerto Vallarta y San Miguel de Allende. Su inspiración, plasmar en cada uno de sus diseños la belleza de la cultura que hace a México un país único, con estilos minimalistas, puros y elegantes.
Entre sus colecciones destacan una inspirada en la Lucha Libre, denominada Santísimo, con estilos con influencia en esa época. Su colección más reciente se inspiró en las flores de quien ha visto a lo largo de todo este tiempo florecer a un diseñador jalisciense incansable, su madre; “ me inspiré en sus flores favoritas, el cempasúchil, las bugambilias, flores muy mexicanas”.
Elaboradas con textiles cien por ciento naturales, son piezas que abrazan a quien busca moda de buen gusto sin importar su identidad sexual; piezas que invitan a descubrir la belleza de México a través de la moda.
