Qatar es uno de los países más ricos del mundo gracias a su riqueza de petróleo y gas natural; sin embargo, durante siglos, antes del hallazgo de yacimientos de gas y oro negro, la pequeña nación arábiga basaba su economía en el buceo de pesca de perlas, por ello su denominación: La Perla de Medio Oriente.
En el fondo de manantiales de agua dulce, los cataríes durante la década de los años 50, emprendían largos viajes para dedicarse a abrir ostras y encontrar las perlas, una actividad que representó la principal fuente de empleo e ingreso para sus habitantes, llegando a representar hasta el 75% de las exportaciones totales del Golfo Pérsico, acaparando el 80% del mercado mundial en este sector.
Las perlas extraídas se vendían desde Turquía hasta India y China, llegando hasta Europa. En los barcos de extracción de perlas, los Dhow, más de 30 hombres se embarcaban en largos viajes; una actividad difícil, ya que los pescadores emprendían largos viajes para conseguirlas, aguantando la respiración por mucho tiempo o buceando para encontrar este tesoro en el fondo del mar.
Un recurso muy escaso que sólo se manifestaba por temporada (se estima que una de cada 10.000 ostras contiene una perla), por lo que la recolección de perlas se llevaba a cabo, de manera intensiva, en junio y septiembre. Buzos y tripulaciones que navegaban por dos meses en un viaje de 40 días en los que volvían con grandes cargamentos de perlas preciosas.
Sin embargo, la industria cayó cuando el país asiático Japón introdujo el cultivo de perlas. El número de barcos se redujo gravemente, cayendo en una de sus peores crisis económicas. El descubrimiento de grandes reservas de petróleo y gas natural, y su fuerte exportación en los años 90 colocó a su economía en una de las más importantes a nivel mundial.
En Qatar aún existen grandes conocedores que en pequeños negocios continúan buscando en los manantiales estas piedras preciosas, y en el mes de mayo se realiza una competencia de búsqueda de perlas.
En la ciudad de Doha existe un monumento en forma de ostra gigante abierta con una perla muy grande en su interior, una conmemoración a todos los pescadores que se sacrificaron para que su nación siguiera adelante.