En México tenemos ese gran valor de darle destello a cada pieza

por adminjoyam

Por: Thelma Gust Ramos

En entrevista para Joya Magazine, el Lic. Guillermo Vázquez Orozco, director general de la firma Vazoro Joyas comparte su visión sobre los desafíos del 2024 y los retos y virtudes que tiene la industria joyera de cara al 2025

Con más de tres décadas de trayectoria en la industria joyera mexicana, Vazoro Joyas es una empresa que ha crecido bajo una filosofía basada en la excelencia de sus productos y servicio, para enriquecer la vida de la gente que usa sus joyas, pero sobre todo, para ser el aliado principal de quienes han encontrado en la joyería una oportunidad de negocio e inversión.

Como segunda generación de este legado joyero está al frente el Lic. Guillermo Vázquez Orozco, director general de la firma, quien compartió su visión sobre el impacto que tuvo el 2024 en la industria joyera mexicana, así como las fortalezas y retos que tiene todo un sector para seguir brillando en 2025, y continuar manteniendo ese valor agregado que le da un diferenciador a la joyería hecha en México.

¿Qué cosas positivas dejó el 2024 a la industria joyera mexicana?

“Yo creo que todo empezó desde la estabilización de los mercados, porque veníamos de una post pandemia en donde todos salimos a consumir, y siento que se aceleró mucho el comercio, pero no habíamos vivido como ese asentamiento para poder palpar realmente cómo se iban a comportar los mercados y cómo iba a estar el consumo, en nuestro caso de joyería. Siento que este 2024 pudimos asentar nuestra realidad para poder de ahí partir, para poder planear y producir de acuerdo a lo que sea idóneo para cada una de las empresas”.

“Pudimos darnos cuenta que los hábitos de consumo volvieron a la normalidad, incluso en un año de elecciones, en el que la incertidumbre por saber para dónde iba a pintar el tema político de nuestro país e incluso Estados Unidos alteró la dinámica de consumo; sin embargo, también siento que fue un año de identificar nuestras bases para podernos proyectar para impulsarnos a buscar un mayor crecimiento y desarrollo del comercio”.

En un año de muchos desafíos para México, ¿nos dimos cuenta que la joyería mexicana sigue teniendo gran potencial para el crecimiento económico, y que la industria joyera mexicana va por buen camino?

“Definitivamente, como todo comercio, el tema de la globalización es algo brutal, pero yo puedo palpar en el tema de la joyería que, a su vez es bien valorada la mano de obra calificada, la mano de obra de nuestros artesanos porque podemos producir piezas al detalle y con una personalización que eso lo valora muy bien el consumidor; creo que esto, al final de cuentas, al compararnos con temas de producción en masa, creo que eso es una gran fortaleza el que podamos caracterizarnos por la personalización y esta mano de obra calificada”.

¿Cuál fue el principal reto del 2024?

“Yo creo que en función de toda esta incertidumbre, el poder hacer una empresa esbelta en cuanto a costos, en cuanto
a ser una empresa moldeable, porque de repente si no cuidamos nuestros costos y hay variación en los consumos de los mercados, de las ventas, pues eso nos puede comprometer demasiado; entonces en nuestro caso hicimos una política de reducción de costos, de hacernos una empresas esbelta, moldeable por si el mercado se reduce podernos adaptar, y si el mercado nos proyecta crecimiento poder reaccionar en ese mismo sentido”.

Como segunda generación ¿cómo ha mantenido esa esencia con la que fue creada Vazoro, pero también qué es lo

que ha cambiado?

“Definitivamente todo el tema de la digitalización ha sido una nueva prioridad, y por ahí hemos apostado y sumándonos a esta ola de comercio digital, pero siempre cuidando nuestro mercado principal que es la venta presencial, y cuidando nuestra calidad y mano de obra para ofrecer los productos adecuados”.

“Nuestra filosofía dentro de Vazoro ha sido siempre tener la satisfacción total de nuestros clientes. Nos enfocamos aun así pueda comprometer ciertas utilidades o números siempre tratamos de tener a nuestro cliente en nuestro primer enfoque para que ellos estén contentos, se sientan con el respaldo para poder estar comercializando o consumiendo nuestros productos de joyería”.

Vazoro ha sido una empresa que ha entendido la diversificación, ¿cómo lo ha logrado?

“Eso ha sido una fortaleza y a la vez un reto el poder mantener esta diversificación porque de repente cuando un mercado se contrae el otro puede estar en crecimiento y eso nos puede ayudar a mantenernos a flote o en buenos números; definitivamente es una buena administración dejar que cada línea pueda seguir creciendo como tal para poder seguir teniendo a nuestros clientes cautivos, llámese de un tema de mayoreo o de la venta al detalle con las argollas y anillos de compromiso; mantenernos en vanguardia en cuanto al diseño, uso de materias primas adecuadas, incluso ahora con los diamantes de laboratorio; es decir, tener todo lo que es tendencia para poderlos ofrecer a nuestra clientela para que sigan con nosotros”.

“Poner atención a nuestro equipo, a nuestros colaboradores porque ellos luego tiene la respuesta que nos puede enriquecer para saber hacia dónde tenemos que movernos o moldearnos para fortalecernos. Este diálogo abierto con nuestros colaboradores, nuestros clientes, el estar presente en Expo JOYA. Me encanta poder tener este contacto con los clientes porque estando ahí palpas realmente el mercado. Hay que tener esa apertura, sencillez, humildad de poder recanalizar ciertas cosas en una industria como la joyera en la que te puedes inclinar hacia una gran diversidad de productos y materiales”.

¿La calidad ha sido un diferenciador de la joyería mexicana comparada con la joyería de Italia, Turquía y China?

“Definitivamente sí, la mano de obra de nuestros artesanos es de gran valor. Tenemos este gran valor de poderle dar destello a cada pieza. Hasta cierto punto es una debilidad, pero no estamos en esta producción de masa como a lo mejor hay en otro países, a lo mejor no estamos en este estado, pero al no tener esa virtud de esta producción a tan gran escala, nos da una buena oportunidad para poder realzar cada pieza, poder meterle un mejor terminado, y siempre empezando con el correcto diseño de la pieza, del proceso, hasta llevarlo hasta el último detalle de cada pieza”.

“Una gran virtud de nuestra industria es que cada pieza es duradera, transgeneracional, que se va a ir heredando, regalando al familiar directo. Son piezas que van pasando generaciones en el que tienen gran valor sentimental y por lo tanto como piezas por ser un comodity, y eso puede ser un gran plus de nuestra mano de obra, le damos ese terminado fino”.

¿Cómo puede preservarse el oficio de joyería en México?

“Es una gran pregunta, porque hoy en día estamos muy acostumbrados a querer todo muy inmediato y las nuevas generaciones también quieren ganar más en menos, y todo este aceleramiento es un gran reto ¿cómo poder seguir siendo atractivos?, pero definitivamente creo que son tradicio- nes hasta cierto punto que vamos siguiendo quienes hemos crecido en el ámbito joyero, porque quieres preservarlo; sin embargo, he visto a personas involucrarse en la jo- yería aún y cuando antes no tenían ninguna relación con la industria, y lo vemos en la misma Expo JOYA con los emprendedores, quienes en la digitalización han encontrado una gran herramienta de comercialización”.

“En la industria joyera hemos sido foco de atención en el tema de la mano de obra, a su vez pasa eso, sigue siendo un oficio fino en el que estás trabajando con un metal, con una piedra preciosa, en el que a lo mejor una pieza que estás trabajando tiene alto valor; también hay cierta atracción de las nuevas generaciones de poder incorporarse. Definitivamente, tenemos que generar un buen balance, para que esta tendencia de seguir atrayendo a personas nuevas siga fortaleciendo el oficio y así transmitirles los procesos artesanales, para que la mano de obra calificada siga pasando de generacio- nes y así mantener el legado joyero”.

¿Qué espera del 2025?

“Yo visualizo un panorama, hasta cierto punto mixto, ahora con todo este tema de las elecciones de Estados Unidos nos ha generado inflación en los insumos, en los costos de materias primas, pero a la vez yo visualizo una gran oportunidad de crecimiento si sabemos aprovechar las tendencias de la digitalización y personalización de los productos; creo que por ahí hay una gran oportunidad en la que nos tenemos que sumar todas las empresas que no estemos, y las que ya estemos seguir for- taleciendo el comercio digital. Yo visualizo un fortalecimiento en el comercio, creo que viene un año bueno sabiéndonos enfocar cada quien en lo que tenemos que hacer y echándole todas las ganas”.

También podría gustarte