Por: Thelma Gust Ramos
Las maniobras del Banco de México para contener la inflación mantienen un ritmo alcista en las tasas de interés, alcanzando hasta ahora un máximo histórico del 11.25%, ¿la razón?, los retos ante el apretamiento de las condiciones financieras globales, el entorno de incertidumbre, la persistencia de las presiones inflacionarias acumuladas y la posibilidad de mayores afectaciones a la inflación, de acuerdo con Banxico.
Ante esta situación, las empresas que dependen del financiamiento de deuda y el gasto de los consumidores se encuentran ante un panorama desafiante. Para Antonio Ruiz Porras, coordinador del Doctorado en Estudios Económicos de la Universidad de Guadalajara (UdeG), por un lado, tendrán que sortear el efecto de la inflación con el incremento del costo de los insumos, mientras que en las tasas de interés, si se tiene algún tipo de crédito la dificultad de pago o acceso al mismo, se vuelve una repercusión negativa.
“Normalmente, lo que se recomienda a las empresas que enfrentan una situación de alta inflación o altas tasas de interés es tratar de hacer un proceso de reajuste de sus ingresos y costos; por ejemplo, cuando aumentan las tasas de interés se recomienda básicamente tratar de reducir, en la medida de lo posible, las deudas de tasa de interés variable, pues son las que se ven afectadas de manera directa por el alza, por lo que en algunos casos lo mejor es cambiar la tasa de interés variable por deuda de tasa de interés fijo”.
Señaló que el poder obtener crédito por parte de proveedores, y no a través de instituciones bancarias, evita a las empresas lidiar con las afectaciones inflacionarias; “esto es muy importante porque no sólo se puede negociar crédito, sino también eventualmente se pueden negociar precios, lo que reduce los problemas asociados al incremento de la inflación”.
Priorizar la disminución de costos apoyándose de la tecnología, es un gran nicho de oportunidad que tienen hoy los negocios, pues el uso de plataformas y redes sociales para promocionarse y así poder acceder a sus mercados, puede representarles una reducción en el gasto. “También la tecnología a través de las Fintech está logrando dar financiamiento a las empresas de una manera relativamente barata y con pocos requisitos; esto se debe señalar porque significa que la tecnología no es necesaria sólo para conseguir clientes, sino para reducir costos asociados con la obtención de liquidez”.
Una evaluación de ingresos y costos, con un presupuesto definido; detectar qué gastos pueden disminuirse sin afectar el crecimiento y desarrollo de la empresa, analizando procesos que permitan afinar y agilizar aspectos a mejora; así como tener un fondo de liquidez para poder subsanar cualquier eventualidad ante el incremento de las tasas de interés, el economista recomendó a las MiPymes recurrir a estas prácticas para hacer frente a la inflación.
“Seis de cada 10 MiPymes son financiadas con los recursos de los dueños y fundadores; entonces, es fundamental llevar a la práctica estas maniobras”, reiteró el investigador, quien dijo que estas lecciones se desencadenaron en tiempos pandemia, donde las empresas aprendieron a mejorar sus procesos de comunicación con clientes y proveedores desde el canal digital, la adaptación de procesos administrativos a distancia, el aprovechamiento de plataformas de distribución, la reestructuración de los procesos de inversión, entre otros.
En una percepción sobre el desarrollo económico que tendrá el 2023, Ruiz Porras consideró que, ante la deceleración económica, el crecimiento económico del país alcanzará un aumento de aproximadamente 1%, con todo y las restricciones en el acceso al crédito debido a su aumento; sin embargo, para 2024 vislumbra un escenario mucho más favorable, a causa del incremento de consumo en bienes y servicios por el tiempo electoral.
“Es un comportamiento impulsado por los cambios en la estructura del gasto al sector público, y este gasto normalmente genera rastre sobre todos los sectores de la economía y, eventualmente, lo que esperaríamos sería un crecimiento de la economía más alto, pensando que, si en este año calculamos el 1%, para 2024 podamos tener entre un 2 ó 3% de crecimiento”.
