De estilo neoclásico adornada con hojas de laurel, fabricada en platino y engastada con diamantes, fue la joya que la reina Sofía heredó a la hoy reina consorte de España, Letizia, para su boda.
En el centro, cuelga un diamante en movimiento en forma de lágrima. Esta pieza creada en 1913 fue el regalo de fue de bodas del Kaiser Guillermo II y la emperatriz Victoria Augusta a su única hija, la princesa Victoria Luisa de Prusia, abuela materna de doña Sofía, quien también la portó durante su boda con el rey Juan Carlos.
Esta joya, que es hoy una de las favoritas de Letizia, que la ha lucido tanto siendo Princesa como Reina, fue creada por los hermanos berlineses Robert y Louis Koch confeccionada en platino y diamantes y divida en dos bandas, una superior con hojas de laurel y una inferior con la greca helena de meandro. Están separadas por una hilera de barras en cuyo centro cuelga un diamante en movimiento en forma de lágrima.
Pero ¿a qué se debe su nombre?, la tiara Prusiana fue diseñada para la princesa Victoria Luisa de Prusia, que la heredó al cumplir 18 años. De acuerdo con medios europeos, hasta ahora, la reina Letizia la ha lucido hasta en doce oportunidades, y se espera sea la tiara heredada a la princesa Leonor.