Su color verde olivo la hace ser bella por naturaleza. La piedra Peridoto, que se atribuye a los nacimientos del mes de agosto, fue nombrada como la gema más extrema por el Instituto Gemológico de América, ya que emana del fuerte calor que se produce de la roca fundida en el núcleo terrestre.
De acuerdo con gemólogos, los antiguos egipcios las recolectaban del Mar Rojo, que es actualmente la mayor fuente de Peridotos, por lo que la nombraron la “joya del Sol”, a pesar de tener un color verde olivo causado por la fuerte presencia de hierro ferroso y magnesio.
Para los egipcios, esta piedra la atribuyen al mundo místico, ya que su irradiante brillo ha permitido su fácil identificación por los mineros que extraen la piedra. Actualmente, la piedra Peridoto se extrae en Myanmar, Vietnam, Sri Lanka, Vietnam y China; sin embargo, esta gema ha sido localizada en meteoritos y se cree la posibilidad de grandes yacimientos en Marte y en Luna.
En la industria joyera, el Peridoto se ha convertido en una piedra interesante ya que su color verde aceitunado se debe a su composición química y no a la adhesión de impurezas. Los peridotos tienen una dureza de clasificación de unos 6.5, por lo que es ideal para pendientes y collares; sin embargo, menos conveniente para anillos debido a que su brillo puede perderse fácilmente por rose con objetos duros.
Protagonista en diferentes culturas del mundo, a esta gema se le atribuyen propiedades como a eliminar bloqueos, abrir la mente y el corazón; es considerada también piedra sanadora que ayuda a facilitar los procesos de curación.
Presente en varias culturas del mundo, el peridoto representa para los hawaianos las lágrimas de la diosa Pele. La piedra también encontró su lugar en la decoración de las iglesias al final de las Cruzadas, como el gran peridoto que corona el santuario de los Reyes Magos en la Catedral de Colonia. Los museos en los que actualmente se encuentran los peridotos más valiosos del mundo están de Nueva York y Chicago.
